El Ayuntamiento de Calatayud adaptará su actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para que el suelo que rodea el casco urbano cuente con reservas necesarias con las que hacer frente al crecimiento de la ciudad. Fuentes municipales han confirmado que el equipo de Gobierno iniciará estos estudios urbanísticos tras las vacaciones de Semana Santa.

No se tratará de una revisión global del PGOU sino de impulsar una serie de modificaciones concretas, en sectores estratégicos situados en el cinturón del casco urbano, y estar preparados para un crecimiento de la ciudad no sólo a medio plazo sino también a corto, "y eludir cualquier improvisación".

El estudio abordará posibles recalificaciones de sectores de la ciudad por los que pasa su expansión natural, no sólo para revisar las reservas de suelo edificable para viviendas sino también para otros usos empresariales.

Fuentes municipales señalan que el objetivo de esta adaptación del PGOU es ajustarlo a las necesidades de suelo que aparecen y que seguirán apareciendo ante el crecimiento de la ciudad. En los últimos seis años, la población de Calatayud ha aumentado en aproximadamente un 20%, sin que en este fenómeno haya influido todavía el efecto del AVE.