Quedan pocos días para el inicio del curso pero los niños y niñas de Ateca ya saben que el primer día de clase harán novillos para ir al encierro o encorrer a los cabezudos. El inicio del calendario escolar de primaria coincide precisamente con las fiestas patronales de Ateca, dedicadas a la Virgen de la Peana, y según explicó el alcalde del municipio, Javier Sada, "no podían señalarse estos días como festividad local, ya que los alumnos de secundaria empiezan el curso más tarde y de esta forma se les privaría de los días festivos que les corresponden".

La DGA brinda a cada municipio la potestad de fijar libremente dos días no lectivos por fiestas locales en el calendario escolar, aunque, eso sí, los mismos para la educación primaria y secundaria, de modo que en este caso se ha originado un conflicto de intereses. "Para que todos los alumnos puedan disfrutar de sus días festivos el ayuntamiento solicitó la celebración de San Blas, en lugar de las fiestas de la Virgen de la Peana", explicó Sada.

La escuela vacía

El alcalde explicó que esta circunstacia ya se ha dado en años anteriores y "lo que suele pasar es que la mayor parte de los alumnos no pisa las aulas". En cualquier caso, matizó Sada, el colegio permanece abierto y siempre hay alguno que se anima a acudir a clase.

Una circunstancia se da en Calatayud, aunque en este caso el primer día de clase coincide con el último de las fiestas en honor de la Virgen de la Peña, por lo que el conflicto se reduce a un jornada, en lugar de dos como sucede en Ateca. En la ciudad bilbilitana los días festivos locales se dedicaron a Jueves Lardero y al día siguiente, Viernes de Carnaval.

R. C.