Cientos de personas se unieron el pasado 20 de marzo en Calatayud a los actos de exaltación de los instrumentos de la Semana Santa, preludio de la celebración de la Pasión y de los característicos sonidos que conforman la tradición en distintos puntos de la geografía aragonesa.

En la ciudad bilbilitana, unas 3.000 personas asistieron al encuentro organizado por la Hermandad del Santísimo Cristo de la Paz y Santo Lignum Crucis. En total, unos 32 grupos de tambores y bombos llegadas desde varias provincias como La Rioja, León, Burgos, Soria, Valladolid y Tarragona, además de las tres aragonesas, y formadas por niños y adultos participaron en el certamen, según explicó el hermano mayor de la cofradía anfitriona, Fernando González García.

La bilbilitana plaza de España, en pleno casco antiguo de la ciudad, fue el lugar elegido para el multitudinario encuentro, el mismo donde cada año se celebra el auto sacramental del Santo Entierro y por el que habitualmente transcurren las procesiones en la localidad, donde la celebración de la Pasión se remonta al siglo XV.

Resonancia nacional

La tradicional Exaltación del Tambor y el Bombo de Calatayud se ha convertido en un evento "de carácter nacional", algo que también se refleja en la vertiente turística que tanto el certamen como la Semana Santa suponen para esta ciudad. De hecho, en cada nueva edición atraen a un mayor número de visitantes que se acercan hasta la ciudad para disfrutar del fervor y del ocio.

R. CRISTOBAL