Todos los pueblos de la Comarca de la Comunidad de Calatayud volvieron a celebrar la Semana Santa el pasado mes de abril, como siempre con arraigados actos que además de sacar a la calle a todos sus habitantes atraen a un buen número de visitantes. Una vez más, los tradicionales actos se repitieron en todos sus municipios, con las variaciones peculiares de cada uno de ellos, para conmemorar la muerte y resurreción de Jesucristo.

En Calatayud los actos preliminares comenzaron con la tradicional Vía Crucis, que partió desde la iglesia de San Juan hasta el Santuario de la Virgen de la Peña. Este acto, que tradicionalmente se celebraba en Viernes abre los festejos de Pascua en toda la geografía española. De la Semana Santa bilbilitana cabe destacar la celebración del auto sacramental del Santo Entierro, declarada de interés turístico regional, que también es típico del Viernes Santo en otros municipio de la comarca como Ateca, o Torrijo.

En Calatayud, la tradicional Procesión del Santo Entierro, con la participación de todas las hermandades y cofradías de Calatayud partió de la calle de San Juan, y después de recorrer numerosas calles principales, como Rúa de Dato, la plaza del Fuerte, o el paseo Cortes de Aragón, y la plaza de España -donde se celebrará el tradicional Auto Sacramental del Santo Entierro--,.para terminar en la iglesia de San Juan.

El Domingo de Resurrección la cofradía Terceroles del Grupo A.J.B organizó la procesión del Cristo Resucitado en la que participaron además todas las cofradías y hermandades bilbilitanas. Otro de los actos peculiares de la Semana Santa en la comarca de Calatayud es la subida al Monte del Calvario en el municipio de Terrer, que se celebró el Viernes Santo.

R. CRISTOBAL