El contrato de cesión de terrenos en los que se ha ubicado la estación de autobuses durante los últimos 25 años finaliza el próximo 2 de abril, por lo que el Ayuntamiento ha formalizado una solicitud de prórroga, para que no desaparezca la estación hasta que se haya terminado de construir la nueva.

Fuentes municipales confirmaron a EFE que la petición ha sido tramitada a Ibercaja, la propietaria de las instalaciones que se utilizan como estación, buena parte de la planta baja y una gran explanada interior en el céntrico bloque de viviendas donde tiene también su sede central esta entidad de ahorro.

En estos momentos, la consultora IDOM trabaja por encargo del Gobierno aragonés en la redacción del proyecto de la futura estación de autobuses de Calatayud.

El estudio ha comenzado por el análisis de las alternativas posibles, ya que aún no se ha decidido en qué terrenos se construirá el nuevo complejo.

La petición que ha planteado el Ayuntamiento a Ibercaja va dirigida a que se amplíe el convenio de uso de la actual estación y que se haga sin plazo, hasta que estén construidas las nuevas instalaciones, para lo que se calcula que harán falta no menos de dos años.

El Gobierno aragonés ha asumido tanto la redacción del proyecto como la inversión íntegra que requiere la construcción de la nueva estación de autobuses. El Ayuntamiento, por su parte, colabora en el proyecto cediendo los terrenos para la construcción de estas instalaciones.

C. C. C.