En las últimas semanas, Calatayud ha asistido a diversas polémicas entre los partidos, ¿por qué?

--La relación entre todas las formaciones es cordial y correcta. Evidentemente hay fricciones políticas porque es normal que veamos las cosas de diferente manera. Cada partido trata de cumplir el programa y su compromiso con los bilbilitanos.

La última controversia ha girado en torno a una encuesta municipal que -según el PSOE- ha tenido un uso partidista, se ha realizado con medios públicos, y ha utilizado datos protegidos.

--Todo eso es falso, y no lo digo sólo yo, lo dicen los técnicos y el Instituto Nacional de Estadística. El ayuntamiento ha hecho lo que tenía que hacer: consultar a los bilbilitanos sobre las actuaciones municipales. Si lo hacemos con medios propios es para ahorrar, otras instituciones como el Gobierno de Aragón hace sus barómetros constantemente, que cuestan mucho dinero, y nadie se queja.