El antiguo cementerio de Orés, ubicado a unos 300 metros del casco urbano del municipio, se ha limpiado y adecentado para celebrar el Día de los Difuntos. Y es que esta infraestructura municipal, aunque ya no se utiliza porque hay otro camposanto en la localidad, es un lugar muy respetado por los oresanos, ya que todavía se conservan muchas sepulturas en el mismo que se veneran en esta fecha.

Otro de los espacios cementeriales que se ha renovado es el de Piedratajada, donde se han efectuado trabajos de renovación general del mismo, para otorgarle una imagen más moderna.

Además, el equipo municipal ha decidido colocar en este lugar la cruz de los caídos en la Guerra Civil Española, un monumentos de piedra que actualmente se conserva frente a la iglesia de la localidad.