Ejea de los Caballeros inició el sábado 16 de enero su segundo confinamiento perimetral, junto a las tres capitales de provincia y otras cinco poblaciones aragonesas de más de 10.000 habitantes. Así lo decretó el Gobierno de Aragón junto a otras medidas que endurecen las restricciones para tratar de frenar la propagación del virus y que estarán en vigor, en principio, hasta el próximo día 15 de febrero.
De este modo, desde el 16 de enero y hasta el 15 de febrero el inicio del horario del toque de queda se adelanta a las 22.00 horas, se reduce la cifra máxima para los agrupamientos sociales a 4 personas (tanto en lo público como en lo privado salvo para unidades de convivencia) y se decreta el cierre de todos los establecimientos de actividades no esenciales a las 18.00 horas de viernes a domingo. De lunes a jueves se mantiene el horario fijado a las 20.00 horas. Asimismo, se establecen controles objetivos de los aforos en centros comerciales para la verificación del cumplimiento estricto de la norma, y se intensifica la vigilancia sobre estos espacios.
Poco después de que la consejera de Sanidad diera a conocer esas restricciones, la alcaldesa de Ejea, Teresa Ladrero, participaba en una Junta de Seguridad Local urgente, convocada por la Subdelegación del Gobierno en Zaragoza, con motivo de la nueva ampliación de las medidas restrictivas .
En la junta se trataron los confinamientos perimetrales y los asuntos de coordinación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con los Cuerpos de la Policía Local de Zaragoza, Calatayud, Utebo, Tarazona, Cuarte de Huerva y Ejea de los Caballeros. De hecho, el mismo sábado 16 en que entró en vigor el confinamiento perimetral de Ejea la policía local, con la colaboración de efectivos de la brigada municipal, procedió al corte de tráfico de la carretera A-1208 entre Sancho Abarca y El Sabinar en el cruce de Escorón. También se cortó la misma vía en el cruce con la A-1201 entre Pinsoro y Sádaba, todo para para «favorecer y facilitar los controles móviles de la Guardia Civil para la vigilancia del cumplimiento de las medidas de confinamiento». De ello se informó en la siguiente Junta de Seguridad celebrada el 20 de enero en la que se puso de manifiesto «la absoluta colaboración y coordinación entre la Policía Local y la Guardia Civil, el mayoritario respeto a las medidas establecidas y las denuncias de las conductas infractoras de carácter minoritario», indican desde el consistorio. Así, el primer fin de semana de confinamiento perimetral se saldó con cuatro personas denunciadas por la Policía Local por incumplir el toque de queda.
MÁXIMA COLABORACIÓN
Una parte del repunte de contagios en Ejea se ha localizado en la Residencia Villa de Ejea, de titularidad privada, y que ahora está gestionada temporalmente por el Gobierno de Aragón. A su vez, la DGA ha solicitado la colaboración del Ayuntamiento de Ejea y de la Fundación Elvira Otal, gestora de la residencia municipal, que han brindado toda su ayuda y recursos a su alcance. T
