El Ministerio de Cultura, propietario del Castillo de Biel, ha comunicado al ayuntamiento su intención de llevar a cabo una actuación de consolidación en el castillo por importe de 360.000 euros de ejecución material, así como el estudio y elaboración de documentación que permita determinar con mayor precisión actuaciones futuras.

Todo comenzó cuando, en los primeros días del mes de mayo, se desprendieron unas piedras del muro exterior del castillo y cayeron a la calle. El consistorio se dirigió a la Dirección General de Patrimonio del Gobierno de Aragón y al Ministerio de Cultura poniendo en su conocimiento este hecho y haciéndoles ver la necesidad de una rápida actuación porque podía haber peligro para personas y bienes. Además, no se podía saber cómo estaba el resto del muro debido a que está totalmente cubierto por hiedra.

Al poco tiempo se personó en Biel un arquitecto del ministerio. Este realizó una inspección, no sólo del muro exterior, sino de todo el conjunto del castillo. Observó que, en parte, se había deteriorado la cubierta y que era muy difícil su reparación si no se realizaban forjados para poder acceder hasta ella, indicando al alcalde que para que se conservara bien el monumento lo mejor era restaurarlo totalmente y darle alguna utilidad y que, en ese sentido, iba a realizar un informe.

A principios del mes de julio se recibió el informe exponiendo su intención de llevar a cabo la reparación por el importe ya citado de 360.000 euros. En el informe, el arquitecto propone actuaciones tendentes, por una parte, a evitar los desprendimientos de piedras en la zona del zócalo exterior debido a la gran cantidad de vegetación invasiva. Por otra, ya en el interior de la fortaleza, propone la ejecución de forjados acordes con la tipología primitiva y la posibilidad de tapar los abundantes vanos fomentan la nidificación de aves y dañan considerablemente el monumento. Asimismo, propone una tarea de documentación que permita ponderar las posibilidades de la futura puesta en valor del castillo.

Ante este informe, el ayuntamiento se dirigió al ministerio agradeciendo su preocupación, pero también exponiendo la necesidad de una restauración total del Castillo y su posterior conversión en un Centro de Interpretación, que serviría como un factor real de dinamización y desarrollo de la localidad.

JOSE LUIS LASHERAS