Los redobles de tambor y bombo sonaron en Ejea el pasado 5 de abril, ya que se celebró el XXII Concurso de Tambores y Bombos Villa de Ejea, Memorial Mariano Caudevilla. Una cita que se desarrolló en la plaza de España de la localidad, en la que se dieron cita 15 cofradías. Fue un derroche de color, por los hábitos que lucieron los participantes, así como de música, dos elementos que han hecho que este concurso se afiance año tras año y se esté convirtiendo en uno de los más importantes de la geografía aragonesa. Un evento que un año más hizo que los bombos y tambores se convirtieran en los protagonistas absolutos, como preludio de la Semana Santa.

El concejal de Festejos del Ayuntamiento de Ejea, Juan Carlos Navarro, hizo entrega del primer premio en la categoría de adultos. Todas las formación compitieron en dos modalidades: concurso y exaltación, tanto en categoría de adultos como infantil.

El primer clasificado en la categoría de adultos fue para la Cofradía de la Asunción y Llegada de Jesús al Calvario de Zaragoza. La segunda clasificada fue la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, de Barbastro, y la tercera, la de la Hermandad del Santo Cristo de la Agonía y Nuestra Madre Dolorosa, también de Barbastro. Los cuartos clasificados fueron los miembros de la Cofradía de la Institución de la Sagrada Eucaristía, de Ejea, y la quinta, la de la Vera Cruz de Alfaro.

En la categoría infantil el primer puesto de la clasificación fue para la Institución de la Sagrada Eucaristía de Ejea y los segundos, la Cofradía de Nuestro Señor Atado a la Columna, de Ejea.