El Ayuntamiento de Gallur, a través de la Concejalía de Bienestar Social, Educación y Medio Ambiente, y el Colegio Público María Domínguez organizaron un año más el Día del Árbol que este año se desarrolló junto al parque de la plaza Aragón. Una jornada que pone de manifiesto el valor educativo y medioambiental que ambas entidades locales quieren inculcar a los más jóvenes para concienciar, cuidar y potenciar la naturaleza en su entorno.
Así, todos los niños desde los 3 a los 12 años junto con las familias que lo deseron y el público que quiso asistir y colaborar en la iniciativa, formaron parte para seguir desarrollando las zonas verdes en la localidad mediante la plantación de distintas especies vegetales.
En esta ocasión se plantaron las siguientes especies: 40 aligustres seto, cinco arbustos variados, 100 cipreses, cinco hiedras, cinco laureles, diez moreras blancas, 50 pinos, 50 pinos piñoneros, diez plataneros y 40 rosales, lo que supone un aumento respecto a las plantaciones realizadas en años anteriores. Todas las plantas fueron solicitadas por el Ayuntamiento de Gallur al vivero de la Diputación Provincial de Zaragoza, quien facilitó las especies requeridas.
En la plantación colaboraron la biblioteca municipal, Casa de Cultura, Abilio Ruiz, Francisco Zornoza y la empresa Casado Martínez SL, además de miembros de la Brigada Municipal del Ayuntamiento de Gallur.
Además, el ayuntamiento ha destinado parte de las especies vegetales y ornamentales proporcionadas por los viveros de la DPZ a plantar distintas especies en zonas verdes y parques de la localidad.
FUMIGACIÓN PINOS
Por otra parte, el 16 de marzo la Concejalía de Medio Ambiente fumigó el pino del parque Pignatelli con el objetivo de erradicar la procesionaria, insecto que se prolifera en paralelo con el ascenso de temperaturas y que vive en las coníferas (principalmente pinos piñoneros). La inhalación de los finos pelos de la oruga, donde oculta su veneno, puede producir desde urticarias hasta reacciones alérgicas, especialmente en los niños. Además de poder provocar un serio riesgo para las mascotas. Durante ese día, por motivos de precaución, el parque permaneció cerrado al público.
En las siguientes semanas, también se fumigó el resto de la población de pinos que está en el casco urbano. El Ayuntamiento de Gallur ordena realizar estas tareas dos veces al año, aumentando su frecuencia en caso de que fuera necesario. T
