Varios vecinos de la colonia San Antonio de Gallur han visto como en los últimos tiempos aparecían en sus viviendas importantes grietas ocasionadas, según indican, por una dolina que existe en la zona y que cruza la urbanización. De hecho, una familia ya tuvo que dejar su casa hace un tiempo y otra lo deberá hacer de inmediato ya que la misma no reúne las condiciones de habitabilidad.
El origen de todo, según han podido saber los afectados que han encargado varios informes geotécnicos, es la existencia de una dolina en un área de 36 kilómetros a unos 35 metros de profundidad (un agujero de unos 2.000 metros cúbicos).
Desde el Ayuntamiento de Gallur se ha seguido el proceso desde el primer momento en que se originó y, cumpliendo con sus competencias de velar por la seguridad de los vecinos, han comunicado a la familia que debe dejar su casa ante el riesgo existente, según un informe del arquitecto municipal. Conscientes de lo que supone esta situación, el consistorio ha ofrecido a la familia hacer uso de un piso de propiedad municipal de forma provisional hasta hallar una solución, explica la alcaldesa, Yolanda Salvatierra.
Además, el ayuntamiento ha mantenido varias reuniones con los afectados y con la comunidad de propietarios que representa a los 203 vecinos de la urbanización y que señala que el problema no es debido a una dolina, sino a un fallo kárstico. En todo caso, el ayuntamiento mantiene su voluntad de mediar y quiere reunir la próxima semana a afectados, a la comunidad de propietarios, al geólogo que ha realizado el informe y al arquitecto municipal para encauzar el problema hacia una solución. T
