Una vez más, los alcaldes de la Ribera Alta del Ebro se reunieron, en esta ocasión no para tratar asuntos municipales o comarcales, sino para "enfrentarse" sobre el terreno en un divertido encuentro de fútbol.

Esta jornada deportiva ya se ha celebrado con anterioridad, si bien el año pasado la cita se celebró en Luceni, y este año el lugar de reunión elegido fue el municipio de Grisén.

El partido transcurrió el sábado 26 de noviembre y dio comienzo a las diez de la mañana en el campo de fútbol municipal.

Alcaldes y concejales de los diferentes municipios se repartieron en dos equipos. Félix Alegre, primer edil de Grisén, desempeñó el papel de árbitro.

Lo importante de esta actividad no fue el resultado del marcador. El objetivo era disfrutar de una amena mañana practicando deporte y reforzando la relación existente entre ellos.

Y, como no sólo de deporte vive el hombre, tras el esfuerzo los ediles se reunieron en el pabellón de Grisén para reponer energías con una gran comida.

L. SANCHO