Asistir a un encuentro de gigantes es sumergirse en un mundo mágico. Un gigantesco personaje de cartón piedra de alrededor cuatro metros de altura y casi 40 kilos de peso se mueve, mece y baila con soltura y elegancia. Los sones de los músicos pertenecientes a las distintas comparsas se encargan de hacer posible que los portadores de los gigantes realicen, respondiendo a sus sonidos, un movimiento sutil, vibrante con trepidante final.

El encuentro celebrado el 2 de julio contó con un importante inconveniente que los portadores y acompañantes tuvieron que salvar: el fortísimo viento, con rachas de más de 66 km/h. Una contingencia que salvaron con excelente quehacer. Precisamente por este potencial riesgo para los gigantes, Calatayud y Cariñena decidieron no desfilar con sus gigantes.

Al Encuentro de Gigantes Villa de Gallur asistieron las comparsas de Alagón, Borja, Calatayud, Cariñena, Hijar, La Almozara, Luceni, Magallón, Fraga, Valdealgorfa y Gallur. Todas ellas lucieron lo mejor de sí mismo. La plantada se realizó en los Jardines del Pignatelli para seguir un itinerario que partió desde la plaza del Justicia y recorrió la calle Constitución y plaza de España, donde cada comparsa realizó un baile individual para terminar con el baile colectivo final. El desfile continuó por la calle Baja hasta llegar al recinto ferial.

Numerosas fueron las personas que acompañaron en el recorrido a las comparsas con admiración, en un acto inserto en la programación del día final de las fiestas de San Pedro que acaparó una gran asistencia de público. T