Niños y mayores, esperan con impaciencia el disparo del cohete anunciador de las fiestas que comenzarán a las doce del mediodía del día 20, junto con la primera salida por las calles del pueblo de los cabezudos con la charanga.

Esa misma tarde, tendrá lugar uno de los actos más esperados, el desfile de carrozas que con su magia nos transporta a Egipto, al Cuento de Blancanieves, a una granja o a la historia de unas "novias a la fuga". Por la noche, se leerá el pregón a cargo de un pregonero sorpresa.

Los más atrevidos ya preparan el capote y el roscadero para torear tanto en los encierros por las calles, que como novedad se podrán correr en la calle Diputación, como en la nueva plaza de toros que este año tendrá un aire más tradicional, siendo cedida desinteresadamente por los Ayuntamientos de Pinseque (el ruedo) y Villanueva de Gállego (las gradas). No hay que perderse, desde un puesto seguro que no haga peligrar la integridad física, el desencajonamiento de las reses bravas desde el Arco. De Zuera son los dulzaineros que van a participar por primera vez en las fiestas pero no en el pueblo pues ya lo hicieron en el Mes Cultural de Mayo con gran aceptación. La Replaceta será el punto de encuentro para los más jóvenes y para los más peques la ludoteca, en el parque. La verbena y disco móvil aseguran la diversión en las noches de fiesta y hasta que el cuerpo aguante.

Con la Misa Mayor cantada por el coro el día 24 se honra al Santo Cristo, para después dirigirse todos al vermú popular en el pabellón de fiestas. Y por la tarde, acompañados por la Banda Municipal de Música, los figuerueleros y visitantes recogerán su ramo de albahaca con emoción y devoción tras la Procesión del Santo Cristo.

ROCIO OLIVITO / M.B