Los vecinos de Alcalá de Ebro celebraron con entusiasmo las fiestas de la localidad, participando en la programación de actos realizada por la comisión de fiestas y el ayuntamiento de del municipio.
La víspera se celebró el jueves 29 de julio abriendo las fiestas con las tradicionales campanadas y el disparo de cohetes a las 12 del mediodía. Por la tarde los más pequeños disfrutaron en la plaza del pueblo con juegos de cucañas.
El viernes tras el tradicional paloteado en el pabellón, realizado por el dance de la localidad, se disfrutó de la actuación del Teatro Taraneya con la obra "El burro ibérico, especie en peligro de extinción", con la cual rieron tanto los niños como los mayores.
Al día siguiente todos los vecinos de Alcalá pudieron disfrutar de la comida popular de estofado de ternera celebrada en el pabellón municipal, a la que le siguió la actuación del Teatro La Cucaracha que despertó una gran expectación. Pero, sin lugar a dudas, la máxima participación por parte de los habitantes de Alcalá de Ebro la levantaron las grandes becerradas, así como las actuaciones de las orquestas y disco móviles.
LORENA SANCHO
