El equipo de gobierno de Sástago convocó el día 1 de octubre un pleno ordinario que estuvo abierto a todo aquel que quiso. La sesión, que comenzó puntualmente a las 21 horas, tenía por objeto tratar asuNtos de vital importancia para la localidad, por ejemplo, fue de sumo interés para los numerosos asistentes, las gestiones que se vienen realizando para que el consistorio logre hacerse con un edificio que impide que se realicen las obras de ensanche en la confluencia de calle Mayor con San Miguel.

Pero el punto mas controvertido de esta sesión plenaria fue el que hacía referencia a la residencia de Tercera Edad, ya que en un periódico de gran tirada se recogían unas declaraciones echas por el miembro portavoz de la Asociación siglo XX, en las que se afirmaba "que iban a saltar chispas sobre este asunto y que hablaría tanto si le dejaban como si no"

A este respecto, el alcalde de Sástago respondió que "la obra estaba terminada y los fondos adjudicados", pero que éstos "no se pueden utilizar porque el Ayuntamiento no ha recibido las obras de la Empresa Constructora".

Hubo momentos de tensión, desbordamientos de gesto y de palabra, circunstancias que muchos de los asistentes al pleno calificaron de "no deseables, ya que consideran que es necesaria la serenidad, el diálogo y no arrogarse un protagonismo, que no concede la inmensa mayoría".

VICTOR SARIÑENA