--Durante este primer año la hospedería ha obtenido resultados muy positivos. ¿Qué es lo cree que incita a la gente a venir?

-- El turismo principalmente. Las personas se acercan hasta aquí para conocer este magnífico paraje, que además por sus características aporta un clima de tranquilidad, reposo y descanso.

--¿Cuáles son los eventos más solicitados?

--Hay mucha demanda, ya que contamos con un buen acondicionamiento, tenemos un comedor grande y otro pequeño y una cocina selecta que, bajo mi punto de vista, es inmejorable. Hay contratación tanto de bodas como de bautizos, comuniones y cenas de Navidad pero, sin duda, la palma se la llevan los congresos. De hecho, el año pasado se celebró en el monasterio el Día Mundial del Turismo. Las bodas, a pesar de que aún no tenemos la autorización de la Iglesia y, por tanto, sólo pueden ser por lo civil, crean una gran contratación, ya que se suele alquilar todo el hotel y monasterio.

--¿La ampliación de servicios puede ser una propuesta de futuro?

--Pretendemos crear más alicientes para incitar a la gente a venir y conocer un poco más este centro, sobre todo ahora que goza de unas estupendas instalaciones. No nos conformamos sino que queremos otras atracciones para que el cliente se sienta obligado a quedarse unos días más de lo que en un principio tenía previsto. Mi idea va encaminada en el terreno deportivo como puede ser la creación de un campo de golf, equitación, campeonatos en el río aprovechando que el Ebro pasa por aquí al lado.

--A pesar de la gran reforma que se ha realizado, ¿aún queda alguna otra reconstrucción?

--Hemos avanzado mucho y ha habido una gran rehabilitación de las distintas dependencias, jardines, la Plaza San Pedro,... pero no nos conformamos. Los accesos al Monasterio son bastante malos tanto la entrada como las carreteras de acceso. La parte derecha del centro que corresponde al noviciado está todavía por reconstruir. La escuela taller tampoco está finalizada. Todas estas modificaciones contribuirán a que la gente se sienta más atraída a visitar y disfrutar de este maravilloso paraje y para que se conozca un poco más de este monasterio.

R. VIDAL