En noviembre dieron comienzo en Pina de Ebro las obras de la que será la nueva sala multiusos, que estará situada en el antiguo local de la Cámara Agraria. En total, el presupuesto invertido hasta el momento en los trabajos realizados ha sido de aproximadamente 109.000 euros, de los cuales algo más de 78.000 provienen de fondos comarcales, y alrededor de 30.000 han sido aportados por el ayuntamiento de la localidad.

Con estas cantidades está a punto de concluirse la que será la primera fase de los trabajos, y que incluye la demolición de las antiguas instalaciones, el asentamiento de los cimientos, la ubicación de las estructuras de hormigón y finalmente la construcción del vertido.

Dentro de poco se comenzará la segunda fase en la cual, y con un coste y financiación similares a los primeros, se completará el resto del trabajo construyendo el tejado, soleras y fachadas. Una vez terminado, el nuevo centro multiusos tendrá una superficie de 400 metros cuadrados, y estará preparado para acoger en su interior las más variadas actividades deportivas, lúdicas o culturales.

La intención del consistorio es terminar todos estos trabajos antes de que concluya el año Para lograrlo la principal dificultad con la que se enfrenta es conseguir la financiación necesaria, dado que el resto de la obra que queda pendiente se realizará con rapidez por usarse para la misma materiales prefabricados.

Lo cierto es que el gran número de actividades que las más variadas asociaciones y entidades desarrollan en el pueblo a lo largo del año, y la asistencia a las mismas de un buen número de la población pinera, hacen muy necesaria la habilitación de este nuevo local, dado que las instalaciones actualmente disponibles se quedan claramente pequeñas.

Por otra parte los vecinos jóvenes de esta villa cuentan desde hace algunas semanas con un local propio, el nuevo Espacio Joven, edificado en lo que durante años fue un almacén de propiedad municipal. Los trabajos de acondicionamiento de las instalaciones comenzaron a finales del pasado año, y supusieron una inversión de 24.000 euros subvencionados por la Diputación de Zaragoza. En espera de su inauguración oficial, el local fue estrenado para la celebración del baile de nochevieja que, desde hace algunos años organiza el ayuntamiento, y, posteriormente, con motivo del festejo de San Antón, se utilizó el espacio para organizar una fiesta dirigida a los jóvenes.