Los municipios que integran la Mancomunidad Ribera Izquierda del Ebro (La Puebla, Alfajarín, Nuez, Villafranca, Osera y Pastriz), representados por su presidente, Fernando Salvador, han pedido al Delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, una audiencia para manifestarle sus quejas por los ataques vandálicos que están sufriendo algunas zonas de los citadas localidades. Unas incidencias que se registran, sobre todo, los fines de semana y que, según fuentes municipales, "son provocadas por algunas cuadrillas de jóvenes que residen en la zona".

Concretamente, los últimos percances se registraron en La Puebla de Alfindén, donde unos jóvenes quemaron unos palés de madera y unos cartones que un vecino de la localidad conservada en un solar ubicado en la calle Cortes de Aragón. El fuego se propagó rápidamente y tuvo que ser necesaria la intervención de los bomberos de Zaragoza, que fueron avisados por una alfindeño que reside en las proximidades del lugar donde se produjo el siniestro. Afortunadamente no hubo que lamentar ningún daño personal.

Este es sólo uno de los incidentes que se han registrado en esta zona, ya que, según indica Fernando Salvador, "también hemos sufrido ataques al mobiliario urbano". Concretamente, se han registrado actos vandálicos en el parque Aragón, donde se han destrozado algunos aspersores, y en el de la Ermita, donde se ha destrozado parte del mobiliario urbano y diversas zonas verdes.

Una circunstancia similar se dio en Alfajarín hace dos meses. En esta ocasión los daños se registraron en el parque de La Grallera, donde se estropeó la puerta de entrada al recinto, se rompió un banco de piedra y pintó el llamado Vía Crucis, doce elementos que marcan el camino de ascensión al castillo.

La solución a este problema, según apunta Salvador, "es que doten a nuestros municipios de mayor número de efectivos policiales y así se lo comunicaremos al Delegado del Gobierno". Pero hasta que este momento llegue en algunos municipios ya se han tomado cartas en el asunto. Es el caso del alfindeño donde "hemos contratado a una empresa de seguridad privada que vigila los lugares en los que se han registrado incidentes y también otros que son potencialmente más llamativos para este tipo de actos", comenta el alcalde de La Puebla.

N. ASIN