Aún sin ser tan caudalosa y cuantiosos los daños causados por la crecida del Jalón como los del año 2015, esta nueva avenida de abril ha supuesto otro punto de inflexión en el estado del río. Desde el consistorio calatorense recuerdan que «las normas ambientales de protección limitan tanto el uso como especialmente la limpieza de nuestros ríos que acumulan cuantiosa maleza, árboles putrefactos abandonados en los cauces, taponando y obstruyendo el cauce natural de los ríos que ocasiona, con grandes avenidas como la acaecida el 12 de abril, obstrucciones en puentes e inundaciones de campos de cultivos anexos por el discurrir de las aguas».

Si bien es cierto que el dispositivo de prevención y protección civil organizado por la Comarca de Valdejalón minoró los daños, se tuvo que contratar una máquina giratoria que pudiera acceder a los puentes de varias localidades para romper los tapones de maleza que impedían el paso del cauce del río por los ojos de los puentes.

En Calatorao, desde primera hora de la mañana del día de la riada, tanto los sindicatos de riegos, como ayuntamiento y comarca estuvieron coordinados para intentar encauzar las aguas de la mejor manera posible y que se vieran lo menos posibles afectados, en primer lugar las personas y animales cercanos al cauce y los demás cultivos.

También en Bardallur se dejó notar la avenida afectando principalmente a la zona de huerta de la localidad. T