El 1 de abril se celebró en el salón de La Pista la merienda anual de la asociación Ricla y sus raíces, donde una vez más los socios pudieron disfrutar de una tarde de hermanamiento marcada por el buen ambiente.

Previo a la merienda se celebró la junta anual de la asociación donde se eligió a los nuevos miembros y se rindió cuentas del pasado año. Además, los socios asistentes propusieron la realización de nuevas actividades que se esperan desarrollar este 2017.

La tarde siguió con la merienda de socios, a base de un plato combinado de entremeses fríos y calientes preparados por una empresa local que junto con un helado y el café hizo coger fuerzas para el sorteo de la medalla de Santa María Magdalena, que este año fue a parar a Fernando Aznar.

Después se procedió al tradicional sorteo de regalos entre los socios y como broche final a la tarde se jugaron dos emocionantes bingos. T