El Ayuntamiento de La Almunia ha presentado una alegación al anteproyecto de la estación de depuración de aguas residuales que actuará sobre los vertidos de esta localidad y de Alpartir, Almonacid, Ricla y Calatorao.

En la alegación, resultado de un acuerdo plenario de todos los grupos políticos, se propone un nuevo trazado para la tubería que llevará los vertidos de Alpartir y Almonacid hasta la nueva depuradora porque, en el proyecto actual, las aguas residuales de estas localidades desembocan en "la cava", un conducto que se utiliza en La Almunia para evacuar tanto los vertidos como los excesos de agua en casos de grandes riadas. "Hemos propuesto que los vertidos de Alpartir y Almonacid, que se unen a algo más de tres kilómetros de La Almunia, no vayan a la cava porque esta infraestructura no sólo sirve para llevar las aguas residuales, sino que también es el sistema local para evacuar las aguas cuando hay fuertes lluvias", explicaba el alcalde, Victoriano Herráiz.

Desde el municipio se propone a Sodemasa, la empresa pública dependiente del departamento de Medio Ambiente y encargada del plan de depuración, que los vertidos de Almonacid y Alpartir se desvíen por el trazado que tendrá la futura variante de La Almunia, bordeando el casco urbano y evitando el uso de la cava, "que va muy justa", apuntaba el alcalde, cuando hay fuertes lluvias.

El anteproyecto, que salió a exposición pública el pasado 15 de octubre, recoge la construcción de una depuradora en las proximidades del Camino del Francés, en un punto situado a más de dos kilómetros de los cascos urbanos de los tres municipios más cercanos (Ricla, Calatorao y La Almunia), según se exige en la normativa actual. Antes de que se aplicara esta exigencia, la depuradora había tenido otras dos posibles ubicaciones que se han descartado.

Las directivas europeas obligan a que, antes del 2015, todas aguas residuales de la UE estén depuradas y, el objetivo del departamento de Medio Ambiente de la DGA es que el 90% de los vertidos de Aragón se depuren antes de acabar el 2005. Es éste el plazo que se pretende cumplir desde La Almunia con un proyecto que, en un principio sólo afectaba a la localidad y que, posteriormente, se ha ampliado a cuatro municipios más.

Alpartir, Almonacid, Ricla y Calatorao también llevarán sus aguas residuales hasta este complejo, en el que se van a invertir más de 12 millones de euros y que financia el Instituto Aragonés del Agua. Desde aquí, y tras someterse al proceso de restauración, las aguas llegarán al río Jalón, cauce que absorbe actualmente todos los vertidos sin ningún tipo de tratamiento.

La puesta en marcha de este plan de depuración, que afecta a todo Aragón, es una medida medioambiental que tendrá repercusión en la economía de los vecinos ya que, a partir de la puesta en marcha de la estación, se deberá pagar una tasa medioambiental que oscilará, previsiblemente, entre los 18 y los 30 euros por habitante y año.

Otras depuradoras que se construirán en la comarca dentro del Plan de Depuración son las de Lumpiaque y Morata.