C1UANDO UNA PERSONA llega a la consulta dental, el odontólogo, como personal sanitario debe hacerle un breve examen médico a su paciente. En este examen el paciente que sufra hipertensión deberá informarlo pero en muchos casos puede ser el mismo dentista quien le diagnostique esta patología. Ya hemos hablado en otras ocasiones del miedo que sufren muchas personas a ir al dentista pero en el caso de los pacientes hipertensos este temor se agrava por las complicaciones que pueden tener con su enfermedad.

Cuando el corazón impulsa la sangre por las arterias produce una presión contra sus paredes, esta presión se puede medir y es llamada tensión arterial. La hipertensión arterial consiste en una elevación persistente de la presión en las arterias, por encima de unos niveles considerados normales. Los altos niveles de estrés y ansiedad hacen que la presión arterial se eleve a niveles peligrosos en los pacientes hipertensos pudiendo provocar un accidente cerebro vascular o un infarto de miocardio. También tenemos que tener en cuenta en pacientes hipertensos que algunas anestesias y vasoconstrictores pueden provocar un aumento de la presión arterial o arritmias. Esta elevada presión arterial puede provocar también que estos pacientes tengan un sangrado más abundante y durante más tiempo. Si tenemos identificado al paciente que sufre esta patología podemos evitar este tipo de complicaciones.

Es importante que el paciente reduzca esos niveles de estrés y se encuentre lo más relajado posible y de esta manera nos aseguraremos del éxito en su tratamiento. Las nuevas clínicas dentales intentan transmitir a los pacientes un ambiente de tranquilidad y de confort para ayudar a crear esa sensación de bienestar que aleje el estrés y el miedo al dentista. Así mismo, existen hoy día técnicas para minimizar el dolor y de esta manera prevenir la elevación de la presión sanguínea. En el caso de que lo necesitara, pueden usarse ansiolíticos antes de la visita.También es importante que las visitas sean cortas y eficientes para poder controlar el tiempo de sangrado reduciéndolo lo máximo posible.

La hipertensión arterial es una patología que generalmente no produce síntomas pero que es muy fácil de detectar con el instrumental adecuado. La medición de la tensión arterial se realiza mediante un aparato llamado esfingomanómetro y lo reconocerá por ser como un manguito que se sitúa por encima del codo que se infla y comprime un poco para luego desinflarse lentamente mientras que se mantiene el fonendoscopio sobre una arteria del brazo.

Hoy día, la mayoría de los odontólogos están preparados para manejar este tipo de patologías de manera que no sea un impedimento a la hora de realizar un tratamiento dental. Lo que sí es indispensable es que el paciente informe en su primera visita de su problema para que puedan tratarlo con las medidas oportunas. En las Clínicas Dentales Dr. Gustavo Rodríguez estamos preparados para tratar a este tipo de pacientes y hacer de su experiencia en el dentista un momento de bienestar.