Según denuncia la Asociación de Empresarios Agrícolas de la Margen Derecha del Ebro (Aeamde), muchos fruticultores han comprobado numerosos daños provocados por los conejos en frutales jóvenes a pesar de las protecciones, una vez desaparecida la nieve que dejó la borrasca Filomena .

No han sido pocos los agricultores que tras las nevadas provocadas por Filomena , que llegaron a acumulaciones de 20 y 30 centímetros en numerosas comarcas, han comprobado como frutales jóvenes pertinentemente protegidos han aparecido con numerosos daños por encima de esas protecciones. El suelo cubierto de nieve hasta una altura treinta centímetros más alta de lo habitual dejó los troncos expuestos a los conejos que, también por la nieve, vieron desaparecido su sustento habitual.

«Dos días bastaron para que cientos de árboles hayan visto sus cortezas raídas», subrayan desde Aeamde. «Muchos de ellos morirán sin remedio. Algunos podrán salvarse si el daño no ha llegado a rodear por completo al árbol». «Los árboles en los que los conejos han conseguido dar la vuelta completa al tronco del árbol morirán sin remedio ya que la corteza tiene una parte interna, denominada floema, que es la encargada de actuar como línea de suministro de savia. Al haber desaparecido, no es posible que la savia ascienda», explica Agustín Sánchez, gerente de la Aeamde.

La agricultura lleva muchos años manifestando los numerosos daños que causan especies cinegéticas como el corzo o el conejo. Poblaciones que en muchos casos son muy complicadas de estabilizar y de impedir su crecimiento.

«Tras un 2020 conviviendo con la pandemia, un estado de alarma con un confinamiento de tres meses y una reducción significativa de movilidad el resto del año, las poblaciones han sufrido un numeroso incremento a ojos vista y los daños se hacen cada vez más cuantiosos. Un hándicap más para la fruticultura, que afrontará otra campaña en situación muy similar a la pasado», insisten desde la asociación.

Ahora el sector espera que estos daños también puedan ser recogidos y auxiliados dentro de la declaración de zona catastrófica en muchos sitios. T