Alpartir cuenta con una decoración navideña muy especial y elaborada con la técnica del ganchillo. Una decoración que es fruto de la gran labor que está haciendo el grupo de mujeres de rural knitting de Alpartir, un grupo que trabaja durante todo el año pero que esta vez ha regalado a la localidad un bonito árbol hecho de ganchillo, que se ha colocado en la plaza de la Iglesia, y un Belén de ganchillo que estuvo expuesto durante las navidades en el balcón del ayuntamiento, además de adornos de navidad hechos igualmente de ganchillo que decoran un árbol natural del paseo y también del colegio Ramón y Cajal.

«Y es que en Alpartir el ganchillo se ha convertido ya en un sello de identidad del municipio», explica la concejala de Cultura, Helena Gómez, «puesto que nuestras mujeres ya llevan años con este proyecto que comenzó cuando Susana Zarazaga lanzó la prouesta a la Comunidad Educativa de Alpartir». Allí se dieron los primeros pasos, enseñando y tejiendo con los niños y vistiendo como primer trabajo las columnas del centro.

Por ello, Gómez señala que «es un orgullo para este municipio tener mujeres comprometidas, creativas y empoderadas, porque toda esta labor va mucho más allá del simple hecho de tejer y adornar, con ella transmiten su saber a otras generaciones. Son mujeres comprometidas con su entorno, que utilizan el ganchillo como medio de unión, para compartir, transmitir conocimiento de una manera transversal creando espacios de terapia ocupacional. Una actividad que tiene la grandeza de socializarse y relacionarse realizando así un proyecto común», insiste la edil, que destaca que muchas de ellas pertenecen a la asociación de mujeres Kimura, una de las más antiguas del municipio. T