Los niños y jóvenes de Alpartir volvieron a convertirse en los grandes protagonistas de un día muy especial. Ayuntamiento, comunidad educativa, familias y vecinos, junto al Consejo de la Infancia y Adolescencia, celebraron juntos que Unicef haya concedido al municipio el sello de Ciudad Amiga de la Infancia. Fue el pasado 19 de mayo en el salón multiusos de El Cine.
En el acto participó la presidenta de Unicef Aragón, Pilar de la Vega, que quiso acompañar a la alcaldesa de Alpartir, Marta Gimeno, y a la concejala delegada de Infancia y Adolescencia, Helena Gómez, y compartir con todo el municipio esta fecha tan señalada.
«Deseamos que el compromiso que Alpartir adquiere como municipio abra la participación activa de los niños. Hay que escuchar sus propuestas y necesidades y reconocerles como personas comprometidas, solidarias y con pensamiento crítico para que sean agentes de cambio», afirmó Marta Gimeno.
Alpartir celebró ser Ciudad Amiga de la Infancia en mayo, pero el proceso se remonta unos años atrás. Fue en el 2013 cuando el CEIP Ramón y Cajal consiguió la distinción de Escuela Amiga de la Infancia. En ese momento la comunidad educativa y el consistorio se comprometieron a dar voz y protagonismo a los niños. A raíz de aquello, en octubre del 2016, la Secretaría Permanente del programa Ciudad Amiga de la Infancia (CAI) hizo pública la resolución que reconocía el trabajo de los municipios a favor de los derechos de la infancia y la adolescencia, otorgando el certificado para el periodo 2016-2020 a 55 nuevos municipios españoles -entre ellos 11 aragoneses-, y a otros 25 que lo renovaban. «Ser Ciudad Amiga de la Infancia es más que un sello, es elegir ser una ciudad donde los derechos se hagan patentes y verdaderos, donde se conviva en torno a los derechos humanos y de los niños, y donde ellos sean protagonistas», indican en Unicef.
Santander acogió el 15 de noviembre el acto institucional en el que Alpartir recibió oficialmente el nombramiento. Un mes después, los consejos infantiles de las ciudades aragonesas asistieron a la renovación del convenio entre el Gobierno de Aragón y Unicef Aragón para seguir trabajando por los derechos y la participación de los niños.
El programa CAI está liderado por Unicef y cuenta como aliados con la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias), Iundia (Instituto Universitario de Necesidades y Derechos de la Infancia y Adolescencia) y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Esta distinción se concede cada dos años tras un proceso de evaluación a los municipios e instituciones que se presentan a la convocatoria del programa. Así se analiza que las líneas de actuación de la política pública diseñados sobre la infancia y la adolescencia se ajusten a los requisitos exigidos.
«Este es un reconocimiento a los niños, que a veces son los grandes olvidados. Debemos darles voz y participación en las actividades que se hacen en el municipio y en la toma de decisiones dentro de la gestión municipal. No debemos decidir por ellos, sino con ellos», destacó Gimeno. T
