3--Hace justo un año decía que su mayor reto era abrir totalmente la junta a la participación. ¿Los presupuestos participativos que acaban de aprobar suponen ya una participación plena o se puede aspirar a más?

--Siempre se puede aspirar a más en participación, pero yo creo que este año hemos dado un paso significativo por el hecho de que todos y cada uno de los proyectos que va a financiar la Junta de Distrito con su presupuesto emanan de los vecinos.

3--Y más allá de los presupuestos ¿cómo se mantiene esa participación a lo largo del año?

--Esa participación se ha mantenido en distintas cuestiones que han ido surgiendo, como por ejemplo el proceso participativo que se abrió para hablar de la reposición de arbolado y zonas verdes como consecuencia de las obras del tranvía, o la visita de seguimiento de las obras del tranvía. Es decir, la participación ha sido el denominador común de todas nuestras acciones en el Actur.

Y hemos tenido muchas reuniones, ya he perdido la cuenta, porque considero que los vecinos aportan algo que es fundamental: la realidad del día a día del barrio. Cuestiones que uno no puede llegar a observar con sus propios ojos, pero que se detectan a través de estos procesos participativos, y más en el Actur que es un barrio bastante inquieto desde el punto de vista social y vecinal.

Pero también hay que destacar que los procesos participativos son complejos porque son dinámicas nuevas, la gente no está acostumbrada a ellos y significa que te tienes que arremangar y trabajar, y eso es precisamente lo que hemos pretendido hacer.

3--Llama la atención que en las propias propuestas vecinales se ha podido ver la concienciación que existe sobre la situación social por la que atraviesan muchas familias.

--Sí. Es verdad. Ellos mismos pidieron hacer un radiografía social del distrito que nos pareció muy interesante porque a la hora de actuar hay que ser consciente de la realidad que te rodea. Y el barrio del Actur es un barrio que engaña bastante porque es relativamente joven, con amplias avenidas, viviendas nuevas.... pero tiene una estratificación social muy singular y hay bolsas de población que está en una situación de vulnerabilidad social importante. Y con este periodo tan largo de crisis se está notando mucho y se han detectado, por ejemplo, problemas de nutrición en algunos chavales. De ahí que surgiera el programa de atención a la infancia que se volverá a poner en marcha el próximo 23 de junio.

3--La Ciudad de la Justicia y el Parque Empresarial de la Expo mueven ya a un gran volumen de gente. ¿Cómo repercute este espacio en el día a día del barrio?

--Hay más vida y más movimiento, pero es parcial. Se está notando la afluencia de un buen número de trabajadores y de usuarios, pero solo por las mañanas, y a partir de las tres de la tarde esa zona vuelve a estar como estaba antes, vacía. Por eso siempre hemos entendido que esa zona del recinto de la Expo y el Parque del Agua se podría utilizar mucho mejor. Yo creo que hay otras alternativas que hay que sondear y que no pasan por la construcción de viviendas, a la que nos oponemos frontalmente. Pero también hay que decir que en esa zona el ayuntamiento tiene una participación muy limitada porque las oficinas las gestiona Expo Zaragoza Empresarial que es en un 98% del Gobierno de Aragón, y es él el que decide cómo ocupar esos espacios y desde la junta y el ayuntamiento se hacen propuestas que resulta difícil que se tengan en cuenta. Por eso hemos reivindicado que se abran cauces de participación tanto en Expo Zaragoza Empresarial que es de la DGA como en Zaragoza @Desarrollo Expo que es municipal.

3--Este año ya está funcionando al completo el tranvía. ¿Cómo ha sido su integración en el barrio?

--Ha habido un encaje perfecto porque el Actur tradicionalmente siempre ha sido un distrito muy bien comunicado, con una red de transporte público muy buena, y ahora con el tranvía la vertebración ha sido absoluta de Parque Goya hasta Kasán, y con el resto de la ciudad. Y la reordenación de autobuses ha complementado el tranvía, tal y como está ahora, porque la primera generó problemas que hicieron necesario revisarla.

3--Hay una zona del distrito, Parque Goya, que va a ver como se cumplen en breve dos de sus demandas: los huertos sociales y la biblioteca municipal. ¿Cómo están ambos proyectos?

--Los dos van a velocidad de crucero. Los huertos del Proyecto Agros, que van a ser finalmente 100 en lugar de 96, ya están acabados y de hecho ya se ha repartido un folleto para que las personas interesadas puedan realizar una preinscripción antes del 6 de junio en la web de Acupama y a partir de esa fecha se podrán inaugurar. Me gustaría incidir en que estos huertos, a diferencia de otros que hay en la ciudad, forman parte del Proyecto Agros impulsado por Cha que se distingue por tener un claro carácter social, por centrarse en la agricultura ecológica y porque van a dinamizar la zona ya que se va a trabajar con escolares, mayores, personas con discapacidad... Y además se van a crear dos puestos de trabajo.

Y luego está la biblioteca municipal que se ubicará en la plaza Poesía en la que, si todo va bien, empezarán las obras a la vuelta del verano para poderla inaugurar a finales de 2014 o principios de 2015. De hecho, ahora estará a punto de salir el concurso para su adjudicación. Estamos satisfechos porque en toda la legislatura solo se van a abrir dos bibliotecas en Zaragoza y una será la de Parque Goya.

3--Y hablemos de las fiestas, que han estado peligrando pero al final se hacen y se mantienen en sus fechas.

--Sí, al final se hacen aunque en un nuevo emplazamiento y desde la junta de distrito hemos hecho lo posible para mediar y buscar el emplazamiento más adecuado que al final es el entorno de la Torre del Agua. Y vuelvo a manifestar el agradecimiento a la comisión de fiestas anterior que ha situado las fiestas de Actur y Parque Goya entre las mejores de la ciudad, y también quiero agradecer a la nueva comisión de fiestas que ha hecho un gran trabajo porque le ha tocado organizar las fiestas con muy poco tiempo, pero son todo gente joven, con muchas ganas de trabajar y que ha suplido la falta de experiencia con grandes dosis de ilusión para conseguir que las fiestas empiecen el 30 de mayo en la fecha prevista.