Por sexto año consecutivo, la Asociación de Vecinos Tío Jorge Arrabal ha organizado las Jornadas de Identidad del Arrabal en el marco del Casco Histórico del barrio, que rindieron homenaje al Tío Lucas y estuvieron abarrotadas de público y sensaciones.

El público acudió a la convocatoria vecinal a través de las diferentes propuestas programadas, llevándose una grata sorpresa y un buen sabor de boca. Centenares de vecinos desfilaron por el Callejón de Lucas, centro neurálgico de estas jornadas, así como por el resto del Casco Histórico disfrutando de una experiencia única, que no dejó indiferente a nadie.

Y también afloraron muchas sensaciones porque asistir a las Jornadas de Identidad del Arrabal supone sumergirse en el túnel del tiempo hasta principios del siglo XIX, disfrutando de la recreación de la escena urbana de esta época que año tras año sorprende a propios y extraños. En apenas 20 metros, la distancia del Callejón de Lucas, única calle cubierta de Zaragoza, los asistentes retroceden dos siglos, todo ambientado por la indumentaria de época, oficios tradicionales...

Pero además estas jornadas contaron con una programación variada y sorprendente. La Colla gaitera del Arrabal puso el acento en la música tradicional y popular aragonesa recorriendo el Casco Histórico hasta llegar a la plaza de la Mesa, convirtiendo con sus sones y alegría un paseo musical en un improvisado baile popular tradicional que consiguió la entrega de los que allí estaban bailando, generando un ambiente vecinal irrepetible, un sentimiento de pertenencia al entorno, exhibiendo la magia del sentimiento rabalero.

Por la noche, con la luminaria propia del siglo XIX en forma de faroles, la ronda jotera, a cargo del Royo del Rabal, prosiguió con la magia de este día.

El domingo comenzó con un nuevo paso del túnel del tiempo que supone la recreación de escena urbana, y, de forma simultánea, el grupo de voluntarios guías turísticos del Arrabal enseñaron el entorno a los vecinos en una ruta turística plagada de historia, acontecimientos y anecdotario que sorprendió y atrajo el interés de decenas de zaragozanos.

Los actos concluyeron con un sencillo homenaje al Tío lucas, lugarteniente del Tío Jorge, héroe de los Sitios y rabalero que falleció defendiendo el Arrabal en los Sitios el 14 de febrero de 1809. Una corona de laurel bajo la placa que da nombre a su calle, constituyó el homenaje de sus vecinos.

Este tributo histórico, patrimonial y turístico, no dejó de lado su carácter reivindicativo, ya que la pretensión de la asociación de vecinos mediante estos actos es poner en valor este enclave y trabajar bajo el lema Somos capaces de poner sobre la mesa el potencial del Casco Histórico del Arrabal como barrio de artesanos, trabajar para evitar la degradación urbana de este entorno y atraer nueva población que dote de mayor vida a este entorno para convertirlo en un lugar exclusivo imprescindible en el devenir turístico, cultural y comercial de Zaragoza.

Estas jornadas no hubieran sido posible sin la colaboración desinteresada de la Asociación Cultural Mariano Lucas, el Grupo Folclórico Royo del Rabal y la Colla Gaitera del Arrabal, y todo ello bajo la organización de la Asociación de Vecinos Tío Jorge Arrabal.