Desde el pasado lunes 23 de junio, se encuentra en funcionamiento la segunda edición del programa de atención a la infancia puesto en marcha en el distrito Actur-Rey Fernando al que acuden 80 niños y que es mucho más que un simple comedor social, como destaca el presidente de la Junta Municipal, Carmelo Asensio (CHA). "El programa de atención a la infancia supone una actuación integral y una intervención social completa en la que, además de dar una comida adecuada a los menores, se les ofrece la posibilidad de participar en un programa educativo, de ocio y tiempo libre", precisa Asensio.

Para ello, tras comer en el Centro de Mayores Actur--Rey Fernando, donde este año ha sido necesario establecer dos turnos, los pequeños se dirigen por la tarde a las sedes de las entidades Sinmugas-Mancala u Os Mesaches donde son atendidos durante varias horas. Y esto será así durante lo que queda del mes de junio y julio, mientras que en agosto tanto la comida como las actividades de la tarde se llevarán a cabo dentro de Zaragalla, el programa municipal para niños en verano.

Un programa en el que la Junta de Distrito invertirá este año 11.6000 euros, más del doble de los 4.000 euros que destinó el año pasado "porque empezamos casi tres semanas antes y encima casi con el doble de niños", puntualiza Asensio, quien destaca que "toda la junta estamos de acuerdo en que el esfuerzo merece la pena". Y es que la iniciativa, una propuesta realizada por la Plataforma Solidaria de Actur y Parque Goya, cuenta con el total respaldo de la junta de distrito, los servicios sociales y las entidades ciudadanas de la zona.

Y todo ello supone un planteamiento totalmente distinto al que ha llevado a cabo el Gobierno de Aragón con la apertura durante el verano de cinco comedores escolares en la ciudad --uno de ellos será el del CEIP José Antonio Labordeta-- y que realizará en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza. Porque, según el presidente del distrito, "el modelo de la DGA es improvisado y precipitado y no va a realizar un trabajo de intervención social completa. Es más, va a suponer una estigmatización de los menores porque en un mismo centro va a haber niños desde por la mañana cuyas familias pueden pagar 400 euros porque realicen actividades y a mediodía entrarán otros que no pueden pagar ese dinero a los que solo se dará de comer y tendrán que volver a sus casas". Por ello, desde CHA se había solicitado extender el modelo del Actur a toda la ciudad, aunque al final no se ha llevado a cabo.