Con menos afluencia que en otras ocasiones, pero con más ilusión que nunca, el sábado 23 de agosto se celebró la sexta edición de la popular cena de la calle Mayor de Letux, que los vecinos engalanaron para la ocasión.

El chiqui encierro y el cabezudo Diablo dieron el pistoletazo de salida a la fiesta, en la que tampoco faltó una divertida guerra de globos de agua que hizo disfrutar enormemente a los más pequeños. Mientras, los cocineros Álvaro, Paco y Pascual, preparaban la tradicional paella para los más de 100 comensales, que un año más no defraudó porque estaba muy rica. Para finalizar, el esperado y sorprendente castillo de fuegos artificiales ofrecido por Toni y Pascual, aunque las animadas tertulias y la música hicieron que la velada acabase bien entrada la madrugada. "Todo salió tan bien que nos preguntábamos qué nos depararía la reunión del año próximo", explica José, vecino y organizador del evento.