Una de las primeras fiestas del año en el calendario es Santa Águeda, celebración especialmente esperada por las mujeres pero que en algunos municipios como Lagata es también fiesta grande.

Así, un año más, los lagatinos disfrutaron de tres jornadas de celebraciones en honor a Santa Águeda, que comenzaron el día 5 con una misa en la que participó la Coral de Belchite y ya, el fin de semana, la agenda se intensificó con cine infantil y torneo de pádel el sábado por la mañana, merienda para las mujeres y cena popular y orquesta por la noche. Ya el domingo se celebró la tradicional misa en la que se bendijeron los panes que luego se repartieron junto a moscatel y pastas. A continuación se procedió al reparto de claveles entre las mujeres.

Sin embargo, la festividad de Santa Águeda no solo se celebró en Lagata, sino en la práctica totalidad de los municipios del Campo de Belchite como una fiesta reservada para mujeres. En el caso de Almonacid de la Cuba, el día 5 hubo misa y merienda. La cena en la que se eligieron a las Águedas entrantes se reservó para el sábado 8. Un honor que este año recayó en Marta, Laura, Ester y Estela.

También en Codo, la Asociación Amas de Casa Benjamín Jarnés celebró la tradicional cena el día 8 a la que asistieron medio centenar de mujeres que no solo disfrutaron de una comida estupenda y la compañía, sino además del espectáculo preparado por Teatro Esparto, que consiguió divertir y entretener a las presentes. Y, como es tradición, se coronó a la nueva Águeda del 2020 que lució orgullosa su banda. Además de la cena, el día 5 se reunieron en la puerta de la iglesia para cantarle a Santa Águeda, una costumbre de antaño en la que se reunen mujeres y niñas de todas las edades.

El sábado también fue el día elegido en Fuendetodos por las mujeres para celebrar esta fiesta en el Espacio de Fuendetodos con el mejor catering, sorteos y música, entre otras actividades.

Y en Plenas la celebración también fue doble. El día 5 hubo misa y, por la tarde, chocolate, juegos de cartas y cena con huevos fritos, panceta y trufa recién cogida. Ya el sábado fueron más de 30 las mujeres plenenses que disfrutaron de una exquisita cena en la que no faltaron el bingo, el baile y las tradicionales reliquias de la santa. T