Una de las consecuencias del confinamiento y las medidas de seguridad tomadas para evitar la propagación del covid-19 ha sido la suspensión de todas las celebraciones y actos sociales desde el 14 de marzo. Así, este año no se han podido llevar a cabo celebraciones tan arraigadas como la Santa Santa que Lécera quiso vivir, aunque fuera desde el confinamiento, y desde balcones y portales sus vecinos no dudaron en romper la hora el Jueves Santo a medianoche, mientras por la megafonía del Ayuntamiento de Lécera el cura párroco dedicó unas palabras y dos vecinos voluntarios tocaron para poder seguir el ritmo todos juntos. Además, el resto de jornadas de la Semana Santa el cura párroco utilizó la megafonía del ayuntamiento para que todos sus vecinos pudieran escucharlo.

Las fiestas patronales en honor a la Virgen del Olivar de Lécera también se suspendieron pero no por ello se dejó de celebrar la novena a la Virgen desde la megafonía del ayuntamiento. T