Gracias al Fondo de Desarrollo Territorial y Rural de Aragón, la Comarca del Campo de Borja ha podido ejecutar el sellado definitivo del vertedero comarcal, una obra que ha ascendido a 87.649 euros, a los que se habría que sumar el importe del proyecto, de 7.217 euros. La obra ha sido financiada al cincuenta por ciento por el Gobierno aragonés y la Unión Europea (UE), a través del programa Feader. Las cifras fueron anunciadas el pasado 6 de junio por el consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez.

Siendo consejero de Medioambiente de la Comarca del Campo de Borja el actual presidente, Eduardo Arilla, se comenzó el sellado del vertedero en el año 2006. Como explica, "el vertedero se encontraba en una situación lamentable, ya que la gestión de sellado diario no estaba siendo nada correcta, sin colocación de chimeneas para la salida de gases, y sin contar que no se había realizado la compra de los terrenos y los propietarios tenían sobre sus propiedades miles y miles de kilos de residuos".

El proyecto inicial "fue muy complejo por la extracción de residuos, ya que para la colocación de chimeneas se bajó a más de 10 metros de profundidad, teniendo en cuenta que el material podía desprenderse". También se realizaron los sellados de las parcelas ya colmadas de residuos, y se adecuaron las cunetas laterales para que el agua de fuertes lluvias no entrara en el vaso de residuos ya sellado. El coste de las obras fue de 220.620 euros.

Una vez concluidos estos trabajos, se puso en marcha la planta de transferencia de Borja, con una inversión de más de un millón de euros. Con ella se daba salida a los residuos fuera de la comarca. Así, se transportan diariamente al vertedero del Consorcio de Residuos que componen las comarcas de Tarazona y el Moncayo, Ribera Alta del Ebro, Cinco Villas y Campo de Borja en la ciudad de Ejea de los Caballeros.

En estos últimos meses se han realizado las obras necesarias para el sellado y clausura definitiva con un importe de 99.136 euros. Como señala Arilla, "concluye pues en estos días un proyecto planificado y elaborado siempre con la idea de eliminar un punto negro de nuestro entorno más próximo. Ahora toca darle otro uso público, esta vez en positivo, valorando las distintas propuestas realizadas, todas ellas siempre encaminadas a que los ciudadanos por fin puedan disfrutar de estas instalaciones para uso lúdico y deportivo".