Como consecuencia de la propagación del coronavirus, el Gobierno español decretó el pasado 14 de marzo el estado de alarma en todo el país, lo que provocó el confinamiento de la población en sus domicilios. Desde entonces y hasta la fecha, municipios y ciudadanos han tenido que extremar las medidas de seguridad y protección y respetar las normas establecidas.

En el caso de Ainzón, el ayuntamiento procedió a cerrar todos los locales públicos y establecimientos que así lo requerían las normas. A los centros que sí podían tener sus puertas abiertas se les facilitó información y carteles informativos, mascarillas y alfombras desinfectantes. Por su parte, la Comarca del Campo de Borja entregó pantallas protectoras.

El personal municipal, junto con agricultores voluntarios que han cedido su tiempo y maquinaria, han procedido a desinfectar las calles del municipio en repetidas ocasiones. También se han repartido medicamentos y pan a domicilio para todos los vecinos que así lo han requerido en el consistorio. «Nuestras tiendas pusieron en marcha de manera voluntariamente el reparto a domicilio y va para ellas nuestro más sincero agradecimiento», indican desde el ayuntamiento de Ainzón.

Una vez autorizados los paseos infantiles para los niños se procedió desde el consistorio al reparto de mascarillas para los más pequeños. Este material fue elaborado en una empresa de confección local y, de forma voluntaria, de la mano de Teresa Bellido García. «Los vecinos que necesiten mascarillas pueden ponerse en contacto con el ayuntamiento. Unas mascarillas que gracias a la plataforma solidaria #desdecasaosayudamos nos han llegado de forma altruista». T