El 6 de febrero, a las 13.00 horas, las campanas de la iglesia de Bureta sonaron en apoyo al medio rural «como una forma de hacernos oir». Los vecinos se concentraron en la plaza de España para apoyar la causa, siempre respetando las normas de seguridad anti-covid.

Por otro lado, el último fin de semana de febrero comenzó en Bureta un curso de monitor de tiempo libre con 13 alumnos. El 90 % del curso está subvencionado por el consistorio para empadronados y residentes. T