El Campo de Borja vibró el pasado martes 2 de septiembre con el paso de la Vuelta Ciclista a España por distintas localidades de la comarca. En muchas de ellas se vivió una jornada única, llena de emoción. Los vecinos de Ambel, Bulbuente y Borja se echaron a la calle para recibir la llegada de los corredores de la crono, dibujaron pancartas y pintaron mensajes en la carretera, animando a su paso a los participantes, en especial a los más destacados en la clasificación.

Es el segundo año que la Vuelta Ciclista a España visita la Comarca Campo de Borja tras la contrarreloj de Tarazona el año pasado. La crono entre el Monasterio de Veruela y la localidad de Borja puso a prueba a los favoritos. Ganó el británico Tony Martin aunque fue el español Alberto Contador quien se vistió con el mallot rojo tras mostrar su poderío en el asfalto.

Los ciclistas recorrieron 36,7 kilómetros con el escollo principal en la ascensión al Alto del Moncayo, de tercera categoría, a 11 kilómetros, tras dejar atrás Alcalá. Tras coronar, vino una bajada muy técnica que cruzó Ambel y Bulbuente para acabar en Borja.

La localidad no dejó un hueco libre en las vallas ni tampoco escatimó en ánimos a los corredores. La décima etapa de la prueba dio un vuelco a la general y también sirvió para promocionar los atractivos turísticos de la comarca, además de suponer un acicate económico para el sector del comercio y servicios. Se calcula que en estos tres días en los que la caravana ha estado en la zona se han realizado 6.000 pernoctaciones, alrededor de 750.000 millones de euros, aparte del consumo que genera.