Después de casi 40 años detrás del mostrador, Concha Román y Ángel Luis Lasheras cerraban por jubilación la única tienda que había en Tabuenca. El consistorio quiso agradecerles el servicio prestado al pueblo durante tantos años con la entrega de una placa conmemorativa. Que se cierre una puerta en un pueblo pequeño siempre es sinónimo de tristeza. Pero siempre queda la esperanza, y así el pasado 8 de enero bajo un manto de nieve, Iratxe Lahuerta una joven vecina del pueblo, subía de nuevo la persiana de lo que ya es la nueva tienda del municipio.

Una noticia con la que todos los tabuenquinos están muy contentos, pues es un servicio básico necesario en el pueblo. Situada en la entrada de Tabuenca y en la calle donde se encuentran los servicios principales del pueblo, como el médico, el colegio, la panadería, la farmacia y la cooperativa, la tienda ofrece dos días a la semana pescado fresco y también servicio a domicilio. «En un año duro para todos, estas noticias son un brillo de luz, esperemos que al menos puedan durar otros 40 años más dando el mismo servicio al pueblo», señala el alcalde de Tabuenca, Miguel Ángel Vela. T