El alcalde de Magallón, Víctor Chueca, se desplazó recientemente a la ciudad zamorana de Toro para reunirse con el alcalde de la localidad, Tomás del Bien, y otros representantes institucionales con el fin de abordar los proyectos que este año se quieren llevar a cabo entre los dos municipios. Chueca aprovechó para visitar la imagen de la pulida magallonera, «que lucía esplendorosa», manifestó.

La corporación municipal de Magallón tiene intención de seguir impulsando estas jornadas de hermandad por la unión histórica que las une. Consideran que tienen la misma identidad y que quieren actualizar estos vínculos históricos y profundizar los lazos de fraternidad que comenzaron en los años 2018 y 2019 con una convivencia presente y futura que quieren compartir y convivir.

Ambos municipios plantean homenajear la figura de los Reyes Católicos y su celebración se llevará a cabo en Toro para verano. También está prevista la participación magallonera en las ferias y fiestas de San Agustín, además de la participación toresana en las Fiestas de la Cruz de Magalllón.

A finales del siglo XV, magalloneros por llamamiento del rey Fernando el Católico ayudaron a la repoblación de Toro. Llevaron plantas, vides y solidaridad y trasladaron el magallonerismo hasta estas nobles tierras castellanas.

Por ello, la ciudad de Toro tiene en su ADN a Magallón. «De aquellas hazañas de nuestros antepasados, nuestro municipio heredó diferentes cuestiones y de legado material el Monte del Realengo, que fue donado por los Reyes Católicos a nuestra villa a principios del siglo XVI. Un elemento muy importante de generación de economía agraria en Magallón y de elemento inmaterial el aprecio, el cariño, el parentesco y el hechizo muto con la ciudad castellana», indican desde el consistorio. T