La cofradía de la Purísima de Magallón fue fundada en 1726, siendo Prior Don Juan Vidal. De hecho, curioseando por los libros que se conservan en la actualidad y que se van pasando cada año de prior a prior, se encuentran actas con una exquisita caligrafía digna de los mejores escritores. También hay datos actualizados por Manuel Gómez, donde se puede ver que en aquellos años la moneda de curso era libras, sueldos y dineros (1L/20 S y 1S 12D). Existía un contador y un secretario de la cofradía.

Actualmente se compone de un prior y cuatro mayordomos, elegidos de entre sus cofrades, alrededor de 200 personas.

Completo programa

Los actos que se programaron para su celebración arrancaron el pasado 6 de diciembre (últimos sábado anterior al día 8 de diciembre) con la celebración de una misa por los hermanos cofrades que han fallecido durante el año. En esta ocasión D. Vicente Alcay Irriera.

Para continuar, el día 7 de diciembre, a las 17.00 horas, se celebraron los tradicionales bautizos. Ultimamente se concentra a todos los niños en la plaza de España y desde los balcones de la Casa de las Monjas se tiran chucherías, golosinas y dulces varios, reparto que congrega a un numeroso público deseoso de participar y contemplar este espectáculo tan popular y arraigado.

El programa se completó el día 8 de diciembre, a las 11.30 horas, con la celebración de la misa en honor a la Virgen de la Purísima Concepción. Una edición más, los mayordomos pasearon en procesión la imagen de la virgen colocada en su peana, adornada con las mejores flores y sus tradicionales roscones. El recorrido de la imagen fue acompañada de la banda de música, los hermanos cofrades y otros muchos acompañantes que recorrieron las calles de Magallón.

Seguidamente, durante la celebración de la homilía, la música del órgano y los cantos de la soprano, bastaron para hacernos más partícipes en un día tan especial para los vecinos de Magallón.

Después de la misa y una vez bendecidos los roscones, todos juntos en la sacristía degustaron el sabroso roscón, regado con un vino, por supuesto, aragonés.

Siendo prior de la cofradía, y en nombre de los mayordomos que han servido este año, os invito a que os unáis a esta cofradía para hacerla aún más grande con vuestro apoyo.

PEDRO CABELLO