La Avenida García Giménez, antigua travesía de la N-330, va adquiriendo color en su primera fase de remodelación tras la instalación de nuevos bancos y jardineras, con pequeñas coníferas, y de barandillas en aquellos tramos que presentan una mayor peligrosidad. Ahora queda pendiente la segunda fase, cuyas obras comenzarán tras las fiestas navideñas, y que tienen un plazo de tres meses.

El arreglo y acondicionamiento de esta vía es una de las obras más importantes acometidas por el ayuntamiento, porque se trata de las entradas al pueblo y porque diariamente soportan un intenso tráfico.

El coste total del proyecto asciende a 661.113,31 euros, de los cuales 240.000 fueron subvencionados para la primera fase por Diputación de Zaragoza, y 330.992 euros para la segunda fase, concedidos por Fomento.

Otra de las intervenciones que ya ha dado comienzo es el entubamiento y cubrimiento del barranco Muladar, cuyo objetivo final es la construcción de un desvío para canalizar el tráfico pesado y evitar su paso por el casco urbano de Muel.