El 10 de abril falleció Benito Báguena Isiegas a los 61 años. Natural de Cariñena, casado y con dos hijos. Benito, amante de la gastronomía, pasó toda su vida alrededor del mundo del vino en diferentes facetas. En su adolescencia trabajó en la viña y colaboró en la explotación familiar hasta que marchó a Barcelona a estudiar Biología.

Desde finales de los 70, ya en la Universidad, Benito, junto con otros jóvenes y no tan jóvenes, se implicó en la cultura y en la modificación de los sistemas de organización de la juventud alrededor de la fiesta creando una organización: Interpeñas, que aglutinaba a todas las peñas de la localidad para vertebrar las fiestas y tener una actividad cultural y social continuada a lo largo del año y socializar a los jóvenes en unos valores que traían los nuevos tiempos en España y Aragón.

En Barcelona residió hasta el año 1987, en que volvió a Cariñena. Desde 1992 colaboró con el Consejo Regulador de la Denominación de Origen para la consecución del Museo del Vino que se inauguró en 1996. Él se encargó de la búsqueda de documentación, fotografías y elementos históricos en todas las bodegas, con los viticultores, con los enólogos, con la ineludible necesidad de que pudieran aportar dichos elementos a la base del Museo del Vino y poder realizar protocolos de cesión o donación al Consejo Regulador.

En 1995, Alberto Sabio Alcutén publica Viñedo y Vino en el Campo de Cariñena: Los protagonistas de las transformaciones (1960-1930). En dicho trabajo la implicación de Benito en la búsqueda de fotografías y documentos fue muy importante. También en el libro El Buen Nombre del Vino que la DO publicó en 2007 con motivo de su 75º aniversario.

Benito regentó uno de los primeros establecimientos de vinos de Zaragoza, La Filoxera, y desde 1997 en Tarragona, L’Ara-Cata, taberna especializada en vinos y productos artesanos de calidad, cuyo significado era productos de Aragón y Cataluña.

Empezó a colaborar en el Festival Tarraco Viva de la mano de la Assocació Tàrraco a Taula, que él ayudo a crear. Junto a su mujer, Pilar López, elaboraba vinos de reconstrucción arqueológica experimental, siguiendo los tratados de los agrónomos romanos Columella, Paladio, Varrón o Plinio, que se podían probar en los talleres gastronómicos y catas que se organizaban durante el festival de recreación histórica, así como en localidades de Aragón y España.

En el año 2007, Benito y Pilar deciden trasladar su residencia a Cariñena. Desde entonces Benito colaboró continuamente con el municipio en diferentes proyectos culturales del mismo. En el año 2008 el ayuntamiento creó el Consejo Sectorial de Cultura y Benito fue designado vicepresidente del mismo. Seguidamente coordinó las I Jornadas de Cine, Vino y Gastronomía.

En el año 2009 se celebraron los actos del Centenario de la concesión del título de ciudad a Cariñena. De la mano de Benito se impartieron conferencias sobre la historia, la sociedad y la economía local con personalidades de renombre como Alberto Sabio Alcutén, Manuel Ferrer Regales, Mª Concepción Estella Álvarez, Félix Báguena Isiegas, Vicente Martínez Tejero, Eloy Fernández Clemente, Ángel Comeras Serrano, Carlos Forcadell y Julián Casanova.

Dentro de los actos del Centenario se aprovechó para homenajear a los establecimientos centenarios de la localidad: Ferretería Blanco, Ferretería Sierra, Palmira Laín, Horno Pascual Simón y Casino Cariñena. Unos meses después y por mediación de Benito Báguena estos establecimientos recibieron, en Zaragoza, la medalla Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio de manos del entonces presidente del Congreso, José Bono.

Benito Báguena contactó con familiares descendientes de José Millán Conde, Marqués de Villafranca, y de Juan Tejón y Marín, Gobernador Civil en 1909 y artífices de la concesión por parte del Rey Alfonso XIII del Título de Ciudad. Consiguió que visitaran Cariñena en los actos conmemorativos y aportaran documentación que en 2010 pudo utilizar para publicar su libro Cariñena. Cien Años. Ciudad. Al mismo tiempo fue coordinador del libro de Miguel Ángel Mainar Jaime, La Mora. Una fuente, muchas vidas.

En enero de 2010, Benito organizó el acto homenaje a los 30 años de Ayuntamientos Democráticos, realizando personalmente la búsqueda de todas las Corporaciones Municipales democráticas en los libros de actas del ayuntamiento. Durante los años 2010 al 2014 realiza diferentes publicaciones en el Programa Oficial de Festejos: Historia de los Gigantes y Cabezudos (2010), Las Peñas de los Años 60 (2011), El Toro de Ronda (2012 y 2014) y Las Transformaciones de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (2013).

En 2011 participó con una conferencia sobre el Cultivo Tradicional del Viñedo en las VII Jornadas Técnicas de Enología del Instituto Joaquín Costa de Cariñena. Durante los años 2011 y 2012 colaboró con la Asociación de Amigos del Ferrocarril en la búsqueda de documentación relativa a la historia del ferrocarril de la zona y que actualmente forma parte del fondo documental del Centro de Interpretación del Ferrocarril de la Comarca Campo de Cariñena.

Codo a codo con Marco Antonio Campos realizan la investigación documental para elaborar el expediente presentado a la Dirección General de Turismo del Gobierno de Aragón para que la Fiesta del Toro de Ronda de Cariñena sea declarada Fiesta de Interés Turístico Aragonés, el 25 de agosto de 2014.

En el año 2016, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, publica el Atlas del Cultivo Tradicional del Viñedo y de sus Paisajes Singulares, y de las diferentes zonas geográficas descritas en esta publicación, Benito Báguena fue el encargado del trabajo de campo y de la investigación de las zonas D.O Priorat y D.O Cariñena.

Benito colaboró en la elaboración del expediente presentado al Gobierno de Aragón para que, coincidiendo con la edición número 50, la Fiesta de la Vendimia, esta fuera declarada Fiesta de Interés Turístico Aragonés, el 11 de agosto de 2016.

El 14 de septiembre 2016, junto con el catedrático Francisco Burillo y en colaboración con la Asociación de Amigos del Toro de Ronda participó en la I Exaltación de la Fiesta del Toro de Ronda de Cariñena.

En el momento de su fallecimiento, Benito Báguena estaba colaborando con el Ayuntamiento de Cariñena en dos proyectos: un libro para público infantil que explicara de forma divertida y didáctica el proceso de elaboración del vino y un documental producido por el etnógrafo Eugenio Monesma sobre el Toro de Ronda de Cariñena.

Benito Báguena Isiegas fue un hombre singular, inteligente y con mucha cultura. Era sencillo, buena gente, leal amigo de sus amigos, generoso, siempre dispuesto a colaborar de forma desinteresada en cualquier proyecto que se le planteara desde el ayuntamiento, o cualquier otra asociación o colectivo del municipio.

No solo fue un incentivador de todo aquello que tenía que ver con el vino, su ciudad y sus gentes, además nos ha dejado un legado de datos, documentos, historias, fotografías que lo perfilan como una persona irreemplazable.

La Corporación Municipal de Cariñena quiere aprovechar estas líneas para transmitir a los familiares y amigos de Benito Báguena, su pesar por tal irreparable pérdida. También en el Ayuntamiento de Cariñena, Benito Báguena Isiegas deja un hueco que nadie podrá llenar.

*Sergio Ortiz Gutiérrez. Alcalde de Cariñena