La Comisión de Cultura de la localidad de Paniza organizó unas divertidas fiestas virtuales para que todos los vecinos las pudieran disfrutar desde sus casas a pesar de no poder celebrarse como siempre. El viernes 22 de mayo arrancó con el tradicional chupinazo y un alegre pasacalles que los vecinos pudieron escuchar por la megafonía simplemente saliendo a sus balcones, los grandes participantes durante unas fiestas tan particulares.

Además, durante todo el día la ermita de Santa Quiteria abrió sus puertas para que los vecinos pudieran visitarla siempre de manera ordenada y cumpliendo con todas las medidas de seguridad. Ya entrada la tarde, dos vecinos del municipio, Andrés Gracia y José Antonio Escribano, ofrecieron un concierto a través de Facebook con el que todos los vecinos disfrutaron de su música.

El buen ambiente y la gran participación no se pudo apreciar en las calles pero eso no impidió que se realizaran concursos de manualidades, talentos y vídeos de peñas donde los paniceros mostraron sus dotes artísticas y mostraron su faceta más creativa y divertida en unas semanas tan difíciles para todos.

El sábado, la comisión también fue la encargada de repartir chuches a todos los niños de la localidad y un globo a todos los vecinos. Posteriormente, a la hora acordada, el cielo de Paniza se llenó de globos en honor a todas las personas que habían fallecido debido al covid-19.

Ya entrada la noche, fueron los jóvenes Daniel Cuenca y Jaime Sánchez los encargados de amenizar la noche con una sesión de música en directo gracias una vez más, a las redes sociales.

Para poner fin al último día de fiestas, los vecinos pudieron disfrutar de varios vídeos que personas vinculadas al pueblo enviaron para desear unas felices fiestas y mostrar todo su cariño hacia el pueblo de Paniza.

Finalmente, y tras un rato de música para todos los vecinos, se dieron los premios a los participantes de los concursos que se realizaron durante el fin de semana por las redes sociales y a las 20.00 horas sonó el cohete que daba por finalizadas unas fiestas diferentes, virtuales, pero con el mismo entusiasmo que siempre. T