Está siendo un verano complicado e inusual para todos, también para el turismo, lo cual no quita que los turistas sigan interesándose y visitando las localidades que forman el Campo de Cariñena y la Ruta del Vino.

La Oficina de Turismo localizada en Cariñena llevaba cerrada desde el año pasado y finalmente ha reabierto sus puertas para recibir y atender a todo aquel que necesite información turística de nuestro territorio. La reapertura ha sido gracias a un acuerdo entre la Ruta del Vino y el Ayuntamiento de Cariñena, posibilitando que se encuentre abierta durante toda la semana. También han vuelto las visitas guiadas en fin de semana a Cariñena y poco a poco se irán extendiendo al resto de localidades.

Las redes sociales de la Oficina de Turismo también están en marcha y proponen semanalmente ‘retos’ a los seguidores en Facebook e Instagram.

Los visitantes que llegan a la Oficina de Turismo preguntan sobre todo por las visitas a bodegas, recomendaciones de restaurantes, paseos por la naturaleza, etc. y la mayoría visitan más de una localidad, sorprendiéndose con la variada oferta de lugares que no conocían con anterioridad. Muchos de los turistas vienen de Zaragoza, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid y este año se han acercado menos extranjeros. Aún así hemos atendido a belgas, argentinos, británicos y franceses.

CAMINO DEL VINO

El 3 de agosto tuvimos el placer de recibir en Cariñena a tres amigos, Edu, Antonio y Rodrigo, los cuales se han embarcado en una aventura a la que han llamado el Camino del Vino. Hace ya unos meses, durante el tiempo del confinamiento, estos tres amigos decidieron hacer algo diferente en sus vacaciones y se forjó poco a poco la idea de crear el primer camino del vino recorriendo en bicicleta (con ayuda de un coche) más de 1.200 km desde Penedès hasta Rías Baixas conociendo catorce denominaciones de origen de vino distintas y disfrutando de las gentes y lugares que irían conociendo a su paso. El fin último es poner en valor y dar a conocer más la importancia cultural, histórica, gastronómica, económica y demográfica que el vino tiene para nuestro país. Además, es una aventura solidaria ya que han incluido el reto de recaudar fondos para una buena causa como lo es la lucha contra la AME (atrofia muscular espinal). T