Villanueva de Huerva espera ansiosa, año tras año, la llegada de una fecha señalada: el 3 de febrero. En este día, los villanovanos celebran a su patrón San Blas y disfrutan de una de las jornadas más señaladas del calendario. Habitualmente, una ceremonia religiosa y la posterior toma del moscatel con rosón bendecido cierran la mañana en la localidad. Y por la tarde, los cafés-concierto y las verbenas con sus respectivas meriendan hacían disfrutar a los vecinos de Villanueva.

Sin embargo, este año todo ha sido diferente. Si la pandemia no hubiera existido se podía haber disfrutado de los oficios religiosos y de toda la parafernalia de la celebración. Por la situación de la pandemia en febrero del 2021, los actos quedaron reducidos a la celebración religiosa con sus medidas de prevención pertinentes para mitigar los efectos del coronavirus y de la tercera ola pandémica en el pueblo. Es así como se podrán celebrar todos los días de San Blas en los años venideros en las mejores condiciones posibles y en familia. Desde el Ayuntamiento de Villanueva de Huerva esperan que la crisis sanitaria pase pronto y se puedan celebrar los acontecimientos como se merece. T