Los vecinos del Lugarico de Cerdán rechazan la inclusión del núcleo de población, perteneciente al barrio rural de Movera, en el catálogo municipal de Edificios y Conjuntos de Interés Histórico Artístico. El Gobierno de Zaragoza aprobó el proyecto inicial el pasado 21 de noviembre, y el cien por cien de los trece propietarios afectados, que presentó alegaciones en contra, espera que el consistorio responda.

El Ayuntamiento de Zaragoza pretende garantizar la pervivencia y el mantenimiento de la singularidad del conjunto y de algunos de sus edificios: las casas de los colonos, el antiguo oratorio --hoy vivienda, la Villa Santa Eulalia-- y la casa palacio de los Marqueses de Ayerbe, los últimos propietarios del antiguo señorío medieval.

Según apunta Ismael Abadía, alcalde de Movera, "los propietarios vinieron un poco asustados a hablar conmigo cuando se enteraron de todo por la prensa, porque el consistorio no les había comunicado nada", afirma. Por ello, la alcaldía aprobó "ofrecer todo nuestro apoyo a la decisión que adoptasen los vecinos".

Y los trece propietarios afectados por la catalogación de sus viviendas decidieron presentar alegaciones contra el proyecto. "Nadie ha pedido esta catalogación. El ayuntamiento ha actuado de oficio sin contar con nadie", afirma José Marqués, presidente de la Asociación de Vecinos Lugarico de Cerdán, entidad que también ha alegado.

"Pedimos que se paralice el proceso y que se sienten a negociar", añade. "No estamos de acuerdo con los criterios que han seguido y, además, la protección llega tarde. La mayoría de las viviendas ha sufrido tantas reformas que ya no queda nada de las antiguas", asegura.

CASAS DEL SIGLO XX

Es el caso del hogar de Antonio Granados. "La casa original se tiró entera y la que hay ahora llevará en pie unos 70 años", señala. "Espero que si el día de mañana no nos dejan obrar, al menos sí nos dejen construir una nueva para mi nieto en la parte trasera".

A juicio de Marqués, la selección "es un despropósito. Pretenden incluir edificios de 30 años. Y el palacio de los Marqueses de Ayerbe se tiró entero y se reconstruyó en los años 60. Solo queda parte de la fachada posterior". El antiguo oratorio, de cuya existencia se tiene constancia documental desde el siglo XIV, tras la disolución de la orden del Temple, es ahora una vivienda que en estos momentos está siendo reformada.

Tanto la vieja capilla como el palacio han sido catalogados como edificios de interés arquitectónico B, lo que implica que se pueden rehabilitar, restaurar y recuperar, pero respetando los elementos originales. Las casas de los colonos han sido calificadas como de interés ambiental, por lo que podrán sufir reformas siempre y cuando se respeten también todos aquellos elementos originarios.

Los vecinos sostienen que la catalogación se ha basado en datos históricos y en el aspecto externo de los edificios, no en la realidad, y temen no poder acometer las reformas necesarias para que sigan siendo habitables. Pero el ayuntamiento insiste en la necesidad de preservar todos aquellos elementos constructivos para los que no sea demasiado tarde.