Más de 2.000 personas se sumaron a las dos últimas marchas ciclistas por el centro de Zaragoza convocadas por el colectivo Pedalea después de que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) prohibiera de forma definitiva que las bicicletas vayan por las aceras. La primera de ellas, celebrada el 26 de septiembre, se pidieron soluciones al Ayuntamiento de Zaragoza tras la sentencia que expulsa a las bicicletas de aceras y las calles peatonales. Y la otra, una semana más tarde, para volver a reivindicar más seguridad y más derechos para los ciclistas.

La concentración final sirvió también para anunciar futuras movilizaciones. El encuentro sirvió también para recopilar las multas de aquellos que habían sido sancionados durante los últimos días para ponerlas en común y presentar un recurso conjunto ante el consistorio. Posteriormente, los ciclistas volvieron a salir a la calle el 4 de octubre para protestar contra las recetas que de forma "indiscriminatoria" sufrieron en los últimos diez días como consecuencia de la huelga de celo de la Policía Local.

El recorrido diseñado, desde la plaza España hasta el edificio Seminario en Los Enlaces, no contemplaba ni un solo carril bici. Los más de 200 ciclistas, según el colectivo convocante, recorrieron el paseo Independencia, la Puerta del Carmen, la avenida Valencia y Gómez Laguna hasta llegar el Seminario.