Tras el éxito de las pasadas ediciones, el Cámping Ciudad de Zaragoza volvió a recibir durante el 25 y 26 de enero el mundo de Warhammer. Este popular juego de mesa recrea batallas fantásticas usando miniaturas que los propios jugadores personalizan a mano. El décimo Torneo Atalaya Vigía, uno de los referentes de esta modalidad, volvió a congregar a aficionados llegados desde diferentes puntos de la geografía española.

Esta competición es una de las de referencia a nivel nacional del universo Warhammer, un juego de estrategia en el que se despliega un gran número de figuras en miniatura que componen ejércitos que reviven legendarias batallas en un mundo fantástico.

Este primer torneo anual se dividió en dos jornadas y en cada una de ellas se jugó una modalidad diferente: fantástica y futurista. De este modo, el sábado 25 de enero le tocó el turno del Warhammer fantástico y ya el domingo se celebró la competición del Warhammer futurista, constituyendo dos torneos diferenciados en los que se jugaron tres partidas y en las que los ganadores se fueron enfrentándo sucesivamente. De este modo, los mejores jugadores tuvieron la oportunidad de medirse entre ellos.

El ganador de este tipo de torneo no sólo es aquel que demuestra una mayor habilidad a lo largo de sus distintas partidas, sino que además también se tiene en cuenta la pintura de las miniaturas y la originalidad y personalización de sus personajes.

El evento estuvo organizado por la Asociación Atalaya Vigía, que actualmente cuenta con 50 socios, y que puso a disposición del torneo un experimentado equipo de organizadores que trasladaron todo su conocimiento de este universo fantástico. Con 80 participantes, "las plazas se ocuparon rápidamente a los pocos días de abrirse el plazo de inscripción con jugadores de toda España, que no se han querido perder la oportunidad de tomar parte en esta primera cita del año", indican desde el cámping.