La apertura de la residencia para mayores de Valdespartera llega en un momento idóneo, tras el cierre de 25 centros para la tercera edad en esta legislatura en la comunidad aragonesa, tanto públicas como privadas, la mayoría por no cumplir con los requisitos de seguridad. El Gobierno de Rudi dio orden de cerrar nueve privadas y una pública. Pero la tónica parece haberse roto.

Aragón está por encima de la media europea en envejecimiento poblacional. Motivo por el que todas las iniciativas dirigidas a la tercera edad "serán bienvenidas" en la comunidad. Así lo dijo a comienzos de mayo la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, en el acto de inauguración de la residencia Santa Bárbara, situada en Valdespartera, que cuenta con 172 camas y 20 plazas para el centro de día.

El presidente de la Fundación Agustina Zaragoza y propietaria de la residencia, Juan Pinto, manifestó la necesidad de construir este tipo de centros principalmente en los nuevos barrios de Zaragoza. "La población va envejeciendo", dijo.

"El rango de 65 años supera el 20% de la población y en Zaragoza nos aproximamos a ese porcentaje", explicó. Tanto es así que estamos por encima de la media europea. "Esas personas que han sacado adelante este país, merecen la máxima atención, por eso la fundación apostó por este proyecto social como prioritario", añadió Pinto.

COLABORACIÓN

La residencia es el resultado de la colaboración entre la fundación, el Ayuntamiento de Zaragoza, el Patronato y el Ejecutivo autonómico. Para Rudi existe la "necesidad de aunar esfuerzos desde las administraciones públicas con la sociedad civil".

La parcela donde se ubica el edificio de dos plantas, en la calle Un americano en París y de 5.700 metros cuadrados, fue cedida por el consistorio gratuitamente y por 75 años, y "cuando se cumplan los 75 años, la cederemos otra vez", adelantó el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, quien quiso recalcar que el tranvía tiene el inicio y el final del trayecto frente al edificio. "Es la aportación más importante", dijo Juan Alberto Belloch.