El festival Out of Mind de performance y arte de acción bajó el telón de su 4ª edición con éxito de público y participación. "Unas 1.500 personas asistieron a las diferentes actividades y otros 40 a los talleres y conferencias", apuntó Sergio Muro, director del festival junto a Juan Escós. Con una programación variada, de contrastada calidad y siempre focalizada en la disciplina artística de la performance, la cita mostró durante cuatro días y en distintos espacios una muestra del trabajo tanto de artistas nacionales como internacionales en este campo de la creación.

Out of Mind arrancó el 28 de agosto con la exposición Misfits de la fotógrafa zaragozana residente en Los Angeles, José Girl, en la Sala Bantierra, que se puede visitar hasta el 17 de octubre. Al día siguiente, el artista Sergio Muro, junto al vídeo jockey Lucio Cruces (Delicius), realizó el performance-mapping Yo soy de Zaragoza en la plaza de Ariño. Se proyectó en los dos edificios más emblemáticos de la plaza, como es la sede de Bantierra y el del Colegio de Arquitectos. Previamente tuvo lugar una sesión de performance por parte de Domix Garrido.

La programación más intensa tuvo lugar el sábado en el solar de la Escuela de Circo Social de Las Armas, en jornada matutina y vespertina. Allí se realizaron talleres de performance con Domix Garrido, un concierto de Green Zola, conferencia performance de Analía Belrán i Janés y un gran abanico de formas de expresión que tiene esta disciplina de arte en vivo.

"Las actividades en El Gancho contaron con la asistencia de los vecinos y público especializado que fue ex professo. La idea es poner en valor espacios en desuso y llevar el arte a sitios donde no existe. El arte hay que democratizarlo y para ello es importante darlo a conocer en lugares donde habitualmente no se hace", afirma Sergio Muro.

El Out of Mind contó con la presencia de los artistas Ramón Qanta (Bilbao), Paco Nogales (Madrid) y Bartolomé Fernando y Truna (Valencia). El toque internacional lo puso la poetisa Lisa Liibbe Lara (Los Ángeles) y Mario Gutierrez Cru (Lisboa). La representación local llegó con el poeta Juan Leiva (Zaragoza) y Mudo (Remolinos), Adela Moreno (Huesca) y The Butchers (Zaragoza). Remolinos acogió la última jornada con un espectáculo de poesía visual sonora a cargo de Bartolomé Ferrando y Truna en el espacio contenedor EnLatamus.

"Es un festival que se ha asentado a nivel nacional y donde todo el mundo quiere venir. Cada año nos cuesta un poco más debido a la reducción del presupuesto, pero siempre intentamos sacarlo adelante". Con esa intención comenzarán a trabajar en la próxima edición que volverá a tener el Casco como escenario. "Además de ser el centro neurálgico de la ciudad todavía quedan en él rincones por dinamizar. La idea es llevar el arte a espacios que normalmente no están activos en Zaragoza", dice Muro.